Puerto de Sevilla Siglo XVI

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jueves, 9 de junio de 2011

IV ENCUENTRO : II VISITA A CARTAGENA

INTERCAMBIO DE ALUMNOS/AS CON CARTAGENA DEL IES S. ISIDORO EN EL PROYECTO “Puerto de Indias- Puerto de Culturas”.


Durante los días 6 al 9 de abril, nueve alumnos/as de 4º de ESO y un profesor del Centro realizamos un viaje a Cartagena con el objeto de mejorar el conocimiento entre ambas ciudades y posibilitar un fructífero intercambio de experiencias entre alumnos y familias.

Después del trabajo en el aula, a finales del segundo trimestre, correspondía un nuevo intercambio. Todos se conocían entre ellos y las experiencias previas habían sido todas ellas muy positivas, tanto en el aspecto cultural como humano.

Salimos el día 6 de abril en el autobús compartido en el que ellos habían viajado desde Cartagena, comimos en Granada y, a media tarde, llegamos a nuestro destino donde nos esperaban las familias de acogida. El viaje, de parte a parte de la geografía andaluza hasta encontrarnos con el levante más meridional, no tuvo más incidencias. Por la tarde/noche los alumnos dieron una vuelta con sus compañeros y, sin más novedades, a dormir…

El día 7 visitamos el puerto en un muy agradable paseo marítimo en e que fuimos observando las diversas bahías, ensenadas, arsenales…toda la complejidad geográfica e histórica de la principal entrada de la cultura oriental en las tierras ibéricas. La mañana era muy agradable, soleada y de suave brisa. Después de comer visitamos su restaurado teatro romano, el nuevo museo del mismo, la vieja planta de una de las iglesias paleocristianas más antiguas atestiguadas. Un día en el que conocimos el principal atractivo de la ciudad: su maravilloso enclave natural y su historia como puerta de la civilización en su expansión hacia Occidente. Una visita por el centro decimonónico y modernista que creció al abrigo de las primeras industrializaciones y una recepción en el restaurado -y precioso- Ayuntamiento de la ciudad por parte de su Concejala de Juventud, completaron el día.

El día 8 visitamos el recinto del parque minero de La Unión, el pueblo del mismo nombre y la bahía de Portman y cercanías. Todo este complejo urbano e industrial fue el responsable del crecimiento económico de la zona durante el s.XIX y principios del XX y resulta muy interesante observarlo e interrelacionarlo con los conocimientos de los alumnos y su forma de interpretar el desarrollo de un país. Resultó muy interesante la relación “mina-flamenco” (causa del famoso cante de las minas y del festival flamenco más importante de la actualidad); el origen del levante andaluz en las explotaciones mineras murcianas puso en contacto esas diversas tradiciones musicales y creó uno de los rasgos culturales más interesantes de la Península Ibérica. Otro aspecto muy interesante del día fue comprobar la degradación medioambiental a la que puede conducir un crecimiento descontrolado y donde los fines siempre se anteponen a los medios. El abandono y el desastre ecológico de Portman (producto del vertido incontrolado del residuo minero) han llegado a ser calificados como el más grave de los producidos en el Mediterráneo en el s. XX. Por la tarde un refrescante baño en una bahía de Cartagena hizo que el día acabara de forma relajada. Día interesante y muy instructivo.

Llegaba el día 9 y a las 10 de la mañana un autobús de la compañía ALSA nos esperaba en la estación de autobuses para devolvernos a Sevilla. Abrazos, direcciones intercambiadas, besos, lágrimas…Fui partícipe de la despedida de ambos grupos y –sinceramente- quedé impresionado del grado de amistad al que habían llegado ambos cursos. Las caras de mis alumnos cuando el autobús se alejaba de la ciudad eran (bueno, eso queda para el recuerdo y la complicidad de los que allí estábamos). Comida en Granada y llegada a las 18,00 horas a Sevilla donde le esperaban las familias correspondientes.

No puedo acabar esta pequeña reseña sin mencionar a los 9 alumnos/as que participaron. No es frecuente que un profesor diga esto: sólo puedo felicitarlos, sin más. Su comportamiento fue excelente y creo que llegamos, ellos y yo, a una buena empatía que nos posibilitó un viaje instructivo a la par que relajante y divertido. Su grado de cumplimiento de las directrices para el intercambio fue óptimo y su compañía me resultó agradable y sin complicación alguna. Alejandro, Daniel, Jesús, Manuel, Marina, Olmo, Pablo, Reyes, Violeta fueron alumnos que demostraron madurez, responsabilidad y simpatía; así da gusto viajar, mi enhorabuena. Para nosotros quedan algunas de las anécdotas que, con el tiempo, seguiremos recordando con cariño.

Sin más, mi ánimo para continuar este tipo de experiencias y, si Cartagena y su proyecto ya concluyeron, quedarán muchas ciudades, amigos y nuevas situaciones que conocer. ¡A seguir con nuevos proyectos!

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